ENFERMEDAD DE PARKINSON. Ganglios Basales y Rehabilitación
La Enfermedad de Parkinson (EP) es una enfermedad neurodegenerativa crónica del Sistema Nervioso Central que afecta a los Ganglios Basales, produciéndose una reducción progresiva de neuronas de la sustancia negra que es la generadora de Dopamina (1). La Dopamina es un neurotransmisor involucrado en la organización del movimiento, por lo tanto, este déficit provoca toda una serie de alteraciones motoras como temblor en reposo, bradicinesia, acinesia, rigidez muscular, alteración de la postura, trastornos del equilibrio y de la marcha (2).
¿A qué se deben estas alteraciones motoras? Es importante
entender como la alteración no está en el propio músculo sino en el cerebro,
que no es capaz de dirigir el movimiento correctamente. La organización del movimiento
normal en el hombre es fruto de una compleja interacción e integración de
diferentes áreas cerebrales. Cada área da una aportación diferente a este proceso
para poder obtener un movimiento correcto (1), en el momento que alguna de éstas
áreas no funciona correctamente vemos alterado el movimiento.
Por lo tanto, es importante que el terapeuta que se ocupa de la rehabilitación y las
personas diagnosticadas de la EP conozcan cuáles son les estructuras alteradas
o lesionadas per el proceso patológico; cuál es el funcionamiento normal de estas
estructuras; cómo estas estructuras están afectadas per la lesión y cómo se pueden
activar para facilitar el proceso de recuperación.
Tradicionalmente se
pensaba que los ganglios basales solo intervenían en el control del movimiento
voluntario, pero actualmente se sabe que contribuyen en otras funciones como
las oculomotoras, las cognitivas y las emocionales.
Toda esta red de conexiones y la
modulación proporcionada por los ganglios basales sirve para conseguir una planificación, iniciación y terminación
apropiada de los movimientos voluntarios; sobre todo de aquellos movimientos
con una dimensión cognitiva compleja (2).
Para orientar el tratamiento neurorehabilitador de forma eficiente, es imprescindible conocer estos procesos y saber valorar cómo están alterados en cada caso para poderlos trabajar durante la terapia y así mantener activas las áreas afectadas.
Para más información pueden contactar directamente con el autor:
Carolina Comellas Batlle email: ccomellas@centroperfetti.com
BIBLIOGRAFÍA
1.
Kandel E R. Principios de Neurociencia. 1º edición. McGraw-Hill, 2001.
2.
Purves D, et al. Invitación a la neurociencia. Buenos Aires: Editorial
Médica Paramericana, 2001.
No se trata de enseñar al enfermo a "moverse", sino de guiarle para que dirija la atención hacia las diferentes informaciones provenientes del cuerpo.
Carlo Perfetti, Neurólogo
El aprendizaje es la condición previa al proceso de desarrollo.
Vygotsky L.S, Psicólogo
El problema está en el cerebro y no en el músculo. Usemos el cerebro del paciente.
Carlo Perfetti, Neurólogo